domingo, 19 de junio de 2011

OTROS SENTIDOS

No puedo atender a nada cuando voy a comer a un chino. Cinco tipos de algas, 4 tipos de setas, 6 tipos de salsa. No puedo concentrarme en otra cosa que en la verbena de sentidos en mi boca. Es como lamer distintas partes de un cuerpo: distinto calor, distinto sabor, distinta textura, distinto color; setas rugosas o suavísimas, algas húmedas y largas, setas planas, algas finísimas. ¡Uhmmm!. Mordisqueo la puntita de esto, que no se lo que es, lamo la cuchara de salsa agridulce, chupo mi dedo mojado en picante… Y el postre,… esas bolitas suaves y sedosas que me acarician la boca y explotan en mil jugos al morderlas. La pasión me ciega. Creo que es por eso, que no reaccioné cuando, al abrir los ojos, la camarera me preguntó en un buen español, con perfecto acento chino: Su compañero se ha ido, ¿desea beber algo más?

© MA
España

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Fue demasiada desatención.
Un fuerte abrazo, Ester.
PABLO GONZ

Anónimo dijo...

Gracias por participar.

Un micro muy sugerente, al estilo Cuando Harry encontró a Sally, pero sin, afortunadamente, tanto grito. Humor más refinado.

Luisa Hurtado González dijo...

Mira que olvidarte de él por un arroz tres delicias!!!
Ahora, desde otro punto de vista, si no supo, ni siquiera entonces llamarte la atención, mejor que se fuera.